Pesadilla
Oscuridad, un ambiente frio y la soledad, es lo que me cubrían en ese momento mientras estaba sentado en una esquina con mis rodillas flexionadas en posicion fetal, mis ojos danzando de un lado a otro tratando de buscar una escapatoria; un camino que me condujera a alguna salida de ese lugubre sitio, pero no había nada, ni la más mínima esperanza. Sentía algo en el ambiente, mi piel se enchinaba y los escalofríos se apoderaban de mi cuerpo, me hicieron temblar mis manos y después, como la onda expansiva de un roca al caer sobre el agua, mi cuerpo también se puso a temblar. Comenzaba a creer que ya no volvería a salir. En mi cabeza sólo se repetía la imagen de mi familia, una y otra vez; mi madre y mis hermanos, a quienes ya no vería. Era tan angustiante y tan sofocante el pensamiento de decepción y preocupación que les dejaría con mi posible desaparición. Mi mente estaba jugando conmigo al ponerme esas imágenes y pensamientos repetidamente cuando un extr...